El deterioro del grano almacenado es un obstáculo importante para los pequeños productores de todo el mundo (Figura 11). La FAO (2022) informó de pérdidas en el almacenamiento de cereales y legumbres de hasta el 60% (maíz en Uganda) y el 50% (caupí en Zimbabue).  Este artículo se apoya en la experiencia del Dr. Floyd Dowell (ingeniero agrónomo jubilado del Centro de Investigación sobre Cereales y Sanidad Animal del USDA) y resalta algunas de las opciones abordadas en publicaciones anteriores de ECHO para el almacenamiento de cereales en entornos de escasos recursos.  Evitar que las plagas y la humedad dañen los productos almacenados toma tiempo, pero también ahorra mano de obra y reduce los riesgos relacionados con las pérdidas post-cosecha.

Principios fundamentales 

Utilizaremos el término grano para referirse a las semillas que se cosechan secas, ya sean de cultivos de cereales o legumbres (frijoles secos). Antes de decidir sobre un método de almacenamiento, considere algunos principios para mitigar el daño al grano en el almacenamiento.

Almacene en lugar seco y fresco 

Almacenar el grano antes de que esté suficientemente seco hace que se cubra de moho, lo que puede causar su deterioro y la producción de toxinas que pueden afectar a los seres humanos y los animales. El grano se puede  dejar secar en forma natural en el campo antes de la cosecha, así como exponiendo el grano recién cosechado al movimiento del aire al sol o a la sombra. 4 Si planea moler el grano después de almacenarlo, no seque demasiado la semilla, ya que esto puede hacer que se rompa durante el proceso de molienda. También puede utilizar pruebas sencillas, como la prueba del tarro (Figura 12; Reader y Motis, 2017) para determinar si el grano está lo suficientemente seco para su almacenamiento.

Una vez que el grano es almacenado, debe mantenerse seco. El contenido seguro de humedad del grano almacenado varía según la temperatura del aire que lo rodea. Las temperaturas más altas requieren contenidos de humedad más bajos. El contenido de humedad de la semilla alcanzará el equilibrio (se estabilizará) en función del tipo de grano y de la temperatura del aire circundante (Tabla 2).

Almacene el grano y las legumbres en un lugar fresco, seco, separado del suelo (Figura 13). Evite que el grano almacenado se moje manteniéndolo bajo techo, creando estructuras protectoras o utilizando material impermeable para cubrirlo.

Almacénelo limpio 

Antes de almacenar granos y legumbres, hay que aventarlos bien para que no queden restos que puedan albergar plagas y enfermedades y ocupen espacio de almacenamiento. El aventado del grano ayuda a eliminar los restos de humedad que pueden contribuir a su deterioro. La eliminación de los restos mejora el flujo de aire a través del grano para ayudar el proceso de secado.   Saque las semillas dañadas, especialmente si hay huevos de insectos en el exterior de la semilla (Figura 14). A menos que trabaje en un banco de semillas pequeño, no tendrá tiempo de inspeccionar todas las semillas. En su lugar, tome una muestra de 20-50 semillas al azar durante su proceso de trilla o almacenamiento e  inspeccione cada muestra minuciosamente. Si observa más daños, presencia de plagas o huevos, reduzca la velocidad y separe esas semillas para limpiarlas más a fondo o consumirlas pronto.

Opciones de almacenamiento 

Ciertamente, no existe un mejor método de almacenamiento para todos los cereales en todas las condiciones y para todos los insectos. Diversos factores influyen en la opción que puede ser adecuada para sus necesidades específicas.  Puede ver una lista detallada y una explicación de los factores en ECHO Notas de Buenas Prácticas: Almacenamiento de Semillas en Los Trópicos. Los métodos de almacenamiento son específicos del cultivo, el clima local, las plagas locales, la duración del almacenamiento y la cantidad que se va a almacenar.  Las prácticas para minimizar los daños y el deterioro del grano almacenado son el sellado hermético, el uso de plaguicidas sintéticos o productos plaguicidas, los productos plaguicidas naturales, el almacenamiento a temperatura reducida y el almacenamiento en atmósfera modificada.

Sellado hermético 

El sellado hermético consiste en restringir la transferencia de aire entre el interior y el exterior de un recipiente, como explica Motis (2022) en EDN 146. Cada vez que se abre el recipiente/contenedor, se vuelve a introducir oxígeno, de modo que este método no es conveniente para los bancos de semillas que distribuyen semillas, pero tiene aplicaciones para cereales y legumbres que se almacenan antes de su consumo o posterior venta.  Los resultados de un ensayo de ECHO indicaron un beneficio, en términos de reducción de los daños causados por el gorgojo del maíz (Sitophilus zeamais), de llenar completamente los contenedores sellados para desplazar la mayor cantidad posible de oxígeno en el contenedor (Dareus, 2021). El sellado hermético exige que las semillas estén secas antes de su almacenamiento para evitar que se deterioren. En el artículo “Ecos de nuestra red” de este número de EDN, Clint Bower comparte sus experiencias con sellado hermético en Haití.

El sellado al vacío es un método de control eficaz para los envases sellables. Motis (2019) lo resume en la Nota técnica nº 93 de ECHO. ECHO Asia sella regularmente al vacío grandes contenedores de semillas con una selladora al vacío de bicicleta mejorada (Figura 15).

Plaguicidas sintéticos o productos tratados 

Los plaguicidas sintéticos y los productos tratados con plaguicidas pueden controlar las plagas en productos almacenados. Los plaguicidas sintéticos vienen en forma gaseosa, granulada, líquida y en polvo. 5 Dowell and Dowell (2017) almacenaron grano en sacos hechos de mosquiteros tratados con deltametrina (un agente de control de mosquitos), así como en contenedores con todas las aberturas cubiertas con los mosquiteros tratados comercialmente.  Tras un mes de almacenamiento, ambos métodos de almacenamiento de grano utilizando mosquiteros tratados comercialmente impidieron eficazmente la entrada del escarabajo barrenador de los granos  en el grano almacenado.

La manipulación, el uso y la eliminación adecuadas de los plaguicidas es importante. Si utiliza plaguicidas, ya sean naturales o sintéticos, siga siempre las instrucciones de seguridad impresas en la etiqueta. Si no hay instrucciones de seguridad, investigue las instrucciones utilizando tantos nombres del producto como conozca, incluidos los nombres locales, los ingredientes activos y las marcas.

Plaguicidas naturales 

Entre las opciones de plaguicidas naturales se incluyen la ceniza, el neem (Azadirachta indica), la tierra de diatomeas, los aceites crudos, el barbasco guineano (Tephrosia vogelli) y muchos más.  Tómese el tiempo para informarse sobre las opciones de plaguicidas naturales que se utilizan localmente para tratar el grano antes de almacenarlo. Pruebe estas opciones a pequeña escala para comprobar su eficacia. Recuerde que los plaguicidas naturales pueden tener propiedades tóxicas, como el barbasco guineano, y por tanto deben manipularse, aplicarse y eliminarse con cuidado. La mayoría de los tratamientos naturales de control de plagas tienen una eficacia variable.

Perturbación mecánica 

Agitar la semilla implica mover las semillas en su posición relativa unas respecto a otras con regularidad. Esta perturbación de las semillas también altera el ciclo vital de la plaga.  Rau et al. (2021) lograron una reducción del 100% del gorgojo del maíz (Sitophilus zeamais) después de 40 y 80 días agitando las semillas cada 12 horas en los contenedores de tratamiento, frente a una reducción del 28% en los contenedores de control donde la agitaban al cabo de 80 días. La frecuencia e intensidad de la agitación requerida para plagas específicas es un área de investigación futura.

Almacenamiento a temperatura reducida 

Bajar la temperatura de los granos almacenados reduce la actividad de plagas y enfermedades y ralentiza la respiración de las semillas (uso de oxígeno). Existe una serie de tecnologías que pueden utilizarse para reducir la temperatura o las fluctuaciones de temperatura en el almacenamiento, incluida la simple práctica de abrir el contenedor de semillas cuando las temperaturas son más bajas (p. ej., en la noche). Kiefer et al. (2020) comparten pasos detallados de cómo hacer estructuras de sacos de tierra con materiales locales. Dispositivos de enfriamiento como refrigeradoras/neveras comerciales o acondicionadores de aire se acoplan a un CoolBot® para su uso en bancos de semillas, pero esta tecnología también tiene aplicaciones para granos de alto valor. Price (2016) explica métodos y costos de construcción de una cámara frigorífica en la oficina de ECHO en ECHO Asia Note 27.

Almacenamiento en atmósfera modificada 

Modificar el oxígeno disponible en los granos almacenados restringe la actividad de plagas y enfermedades. ECHO ha experimentado con la sustitución/desplazamiento del oxígeno -en contenedores de almacenamiento- con dióxido de carbono y biogás, pero se desconocen los efectos sobre las distintas especies y los riesgos potenciales. Motis (2020) resume la metodología y observaciones de ECHO con el almacenamiento de semillas en atmósfera modificada en EDN 146. A gran escala, sin embargo, estas opciones quizás sean menos aplicables.

Conclusión

Este artículo no es exhaustivo en cuanto a la diversidad de productos u opciones disponibles para almacenar granos. Si tiene más ideas, fuentes u otros principios que compartir, por favor hágalo en ECHO Conversations.

Citar este artículo como:

Swartz, S., T.N. Motis, y F. Dowell. 2022. Recapitulación de opciones para almacenar granos. Notas de Desarrollo ECHO. no 158.