Publicado: 19/7/1996


La desinfección de agua por medio solar se puede utilizar para reducir el número de bacterias en pequeños volúmenes de agua potable a nivel del hogar particular. La técnica sencilla de poner agua en bolsas de plástico y otros recipientes exponiéndolas al sol de 2 a 6 horas puso fuera de actividad hasta el 100% de las bacterias del agua contaminada. Los científicos en el Instituto 'Brace Research' en Quebec, Canadá han estado trabajando en la desinfección de agua por medio solar desde 1988. Varios de sus recientes informes de investigación aparecen resumidos a continuación.

Se encontró que la casi radiación ultravioleta (UV) de 300 a 400 nm. tenía un efecto bactericida aparte de la temperatura: "las temperaturas del agua de 12 a 43ºC no afectaron la inactivación de las bacterias." El efecto bactericida de la radiación se ve afectada por la turbiedad del agua, los materiales del recipiente y el clima. El agua con gran turbiedad y contaminación no se desinfecta fácilmente con el sol, de tal manera que es mejor que se asiente y/o filtre el agua antes de exponerla al sol. Con cubierta de nubes: "Se encontró que el tiempo para lograr la eliminación total de bacterias patógenas tenía una variación de 2 horas en las zonas áridas calientes, a 5 horas en las regiones tropicales húmedas o cuando las nubes obscurecían parcialmente al sol." "Debe mantenerse un promedio de intensidad solar de aproximadamente 600 W/m2 por 4-6 horas a fin de permitir la completa eliminación de todas las bacterias en la muestra de agua." Obviamente, los mejores resultados se pueden lograr alrededor del mediodía cuando el sol está más fuerte.

¿Cuál es el mejor recipiente que se usa? Se han realizado muchas pruebas con diferentes materiales. En general, los recipientes claros son mejores que los de color. Las botellas de plástico transparente y las jarras de vidrio, aunque pueden ser utilizadas, tienen muchas formulaciones y pueden dar resultados incongruentes con posibles transmisiones insatisfactorias en el rango UV requerido. Los dos mejores recipientes fueron bolsas de plástico transparente (estas desinfectaron "a un nivel de zero coliforma en casi todas las ocasiones que el agua se expuso a 6 o más horas") y cacerolas de metal (aluminio). Las ventajas de las cacerolas con respecto a las bolsas de plástico son su mayor capacidad y durabilidad. Los recipientes debieran estar enchapados o sellados con una cubierta delgada de plástico (normalmente con niveles de transmisión UV >90%) para evitar la contaminación especialmente en las zonas polvorientas. ​​​​​​​

Cita este artículo como:

ECHO Staff 1996. La Desinfección de Agua por Medio Solar. ECHO Notas de Desarrollo n.o 53